Donald Trump y su tusa reseca
Preguntémosle a Trompoloco
Antonio Vera-León *
Puede que en efecto abril sea el mes más cruel. Pero ¿qué me dicen de los comienzos de mayo?
Preguntémosle a Donald Trump.
A raíz de lo ocurrido en Abottabad, Pakistán, nos asomamos al fondo del ridículo en que se hundió Trump la semana pasada.
El presidente Obama puso fin a las payasadas de Mr. Trump (en lo sucesivo Trompoloco) y los “birthers” haciendo pública una copia certificada de su partida de nacimiento. Al dirigirse a la nación en ese contexto, el Presidente dijo ofrecer el documento a la prensa para, entre otras cosas, poder dedicarse a otros asuntos. Tenía “cosas mejores y más importantes que hacer”.
Ahora sabemos a qué se refería.
Mientras Trompoloco correteaba el país durante toda la semana, robando cámaras, tusa reseca cobijando un cerebrito más intestino grueso que materia gris (sus metas: engordar sus cuentas de banco e incrementar la teleaudiencia de su programita de televisión), el presidente Obama daba los toques finales a la captura de Osama bin Laden.
Siga gritando payasadas Trompoloco.
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* Profesor y autor de varios libros y ensayos para publicaciones académicas. Prepara en Miami una novela.
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